Cuidados especiales con la ortodoncia lingual: todo lo que debes saber

Descubre los cuidados especiales de la ortodoncia lingual: higiene bucal, alimentación, visitas al ortodoncista y más. ¡Cuida tu sonrisa con estos consejos!

1. Higiene bucal adecuada

Uno de los cuidados más importantes que debes tener con la ortodoncia lingual es mantener una higiene bucal adecuada. Esto implica cepillar tus dientes después de cada comida, utilizando un cepillo de dientes suave y una pasta dental recomendada por tu ortodoncista. Además, es importante utilizar hilo dental y enjuague bucal para asegurarte de que no queden restos de comida entre los brackets y los dientes.

Es importante tener en cuenta que la ortodoncia lingual puede dificultar la limpieza de los dientes, ya que los brackets están en la parte posterior de los dientes. Por lo tanto, es posible que necesites utilizar herramientas especiales, como un cepillo interdental o un irrigador bucal, para llegar a todas las áreas y asegurarte de que tus dientes estén limpios y libres de placa.

2. Alimentación y dieta

Otro cuidado especial que debes tener con la ortodoncia lingual es cuidar tu alimentación y dieta. Al tener los brackets en la parte posterior de los dientes, es importante evitar alimentos pegajosos o duros que puedan dañar los brackets o hacer que se despeguen.

Algunos alimentos que debes evitar incluyen caramelos pegajosos, chicles, nueces, palomitas de maíz, manzanas enteras y alimentos muy duros como las zanahorias crudas. En su lugar, opta por alimentos suaves y fáciles de masticar, como purés, sopas, yogures y alimentos cortados en trozos pequeños.

3. Evitar hábitos perjudiciales

Además de cuidar tu alimentación, es importante evitar hábitos perjudiciales que puedan dañar la ortodoncia lingual. Algunos de estos hábitos incluyen morderse las uñas, morder objetos como bolígrafos o lápices, morderse los labios o las mejillas, y chuparse el dedo.

Estos hábitos pueden ejercer presión sobre los brackets y los alambres, lo que puede causar que se despeguen o se rompan. Si tienes alguno de estos hábitos, es importante trabajar en su eliminación para proteger tu ortodoncia lingual.

4. Cuidado al hablar y pronunciar

La ortodoncia lingual puede afectar tu habla y pronunciación al principio, ya que los brackets están en la parte posterior de los dientes y pueden interferir con la posición de la lengua. Es posible que experimentes dificultades para pronunciar ciertos sonidos o que sientas una sensación de presión en la lengua.

Para superar estos problemas, es importante practicar y ejercitar la lengua. Puedes hacerlo leyendo en voz alta, cantando o realizando ejercicios específicos recomendados por tu ortodoncista. Con el tiempo, tu lengua se adaptará a la ortodoncia lingual y tu habla volverá a la normalidad.

5. Visitas regulares al ortodoncista

Es fundamental realizar visitas regulares a tu ortodoncista durante el tratamiento con ortodoncia lingual. Estas visitas son necesarias para realizar ajustes en los brackets y los alambres, y para asegurarse de que el tratamiento avance de manera adecuada.

Tu ortodoncista te indicará la frecuencia de las visitas, que generalmente suelen ser cada 4 a 6 semanas. Durante estas visitas, también podrás resolver cualquier duda o inquietud que tengas sobre el tratamiento y recibir recomendaciones adicionales para cuidar tu ortodoncia lingual.

6. Protección durante actividades deportivas

Si practicas deportes o actividades físicas, es importante proteger tu ortodoncia lingual para evitar lesiones. Puedes hacerlo utilizando un protector bucal especialmente diseñado para ortodoncia, que protegerá tus dientes y brackets de golpes o impactos.

Tu ortodoncista puede recomendarte el tipo de protector bucal más adecuado para ti y enseñarte cómo colocarlo correctamente. Recuerda utilizarlo siempre que practiques deportes o actividades que puedan poner en riesgo tu ortodoncia lingual.

7. Manejo del dolor y las molestias

Es normal experimentar cierto nivel de dolor o molestias al principio del tratamiento con ortodoncia lingual. Esto se debe a que tus dientes y encías están adaptándose a la presión de los brackets y los alambres.

Para manejar el dolor y las molestias, puedes utilizar analgésicos de venta libre, como el ibuprofeno, siguiendo las indicaciones de tu ortodoncista. También puedes aplicar compresas frías en el área afectada para reducir la inflamación y aliviar el dolor.

8. Cuidado al manipular los brackets

Es importante tener cuidado al manipular los brackets de la ortodoncia lingual. Evita tocarlos o moverlos con los dedos, ya que esto puede hacer que se despeguen o se rompan. Si sientes que algún bracket está suelto o fuera de lugar, debes comunicarte de inmediato con tu ortodoncista para que pueda repararlo.

Además, evita morder objetos duros o pegajosos que puedan dañar los brackets. Si tienes alguna duda o inquietud sobre cómo cuidar tus brackets, no dudes en consultar a tu ortodoncista.

9. Mantenimiento y limpieza de los aparatos

Además de mantener una buena higiene bucal, es importante realizar un mantenimiento adecuado de los aparatos de ortodoncia lingual. Esto implica limpiar los brackets y los alambres regularmente para evitar la acumulación de placa y bacterias.

Tu ortodoncista te indicará cómo limpiar tus aparatos de ortodoncia lingual de manera adecuada. Puede recomendarte el uso de cepillos especiales, enjuagues bucales o soluciones de limpieza para brackets. Sigue sus instrucciones al pie de la letra para asegurarte de que tus aparatos estén limpios y en buen estado.

10. Paciencia y seguimiento del tratamiento

Por último, pero no menos importante, es fundamental tener paciencia y seguir el tratamiento de ortodoncia lingual de manera adecuada. La ortodoncia es un proceso gradual que requiere tiempo y dedicación para obtener los resultados deseados.

Sigue todas las indicaciones de tu ortodoncista, asiste a todas las citas programadas y mantén una buena higiene bucal. Recuerda que el éxito del tratamiento depende en gran medida de tu compromiso y cuidado.

Los cuidados especiales que debes tener con la ortodoncia lingual incluyen mantener una higiene bucal adecuada, cuidar tu alimentación y dieta, evitar hábitos perjudiciales, tener cuidado al hablar y pronunciar, realizar visitas regulares al ortodoncista, proteger tus dientes durante actividades deportivas, manejar el dolor y las molestias, tener cuidado al manipular los brackets, realizar un mantenimiento y limpieza adecuados de los aparatos, y tener paciencia y seguir el tratamiento de manera adecuada.

Siguiendo estos cuidados, podrás asegurarte de que tu ortodoncia lingual sea exitosa y obtendrás los resultados deseados en el menor tiempo posible.